Berit Hildre es una artista noruega nacida en 1964 en Alesund, Noruega. Vive en el sur de Francia desde hace unos veinte años. Como escultora, es conocida por sus obras figurativas que a menudo representan a niñas. Las esculturas de Hildre se describen como delicadas y vulnerables, al igual que los temas que representan: frágiles margaritas en el hueco de un valle, que encarnan la frescura, la belleza y la fragilidad de la vida. Expresa una visión poética de la infancia, donde se considera que las niñas creen en ángeles, hadas, trolls, príncipes y magos. Se los retrata como en sintonía con la naturaleza, conversando con animales, especialmente gatos, y coleccionando diversos objetos preciosos como piedras extrañas, plumas de ángel y secretos que guardan en la palma de sus manos.