Alfredo Sosabravo nació el 25 de octubre de 1930 en Sagua La Grande, Cuba. Estudia en la Academia de Artes de San Alejandro, pero es mayoritariamente autodidacta. A partir de 1958 sus óleos y sus dibujos se exponen en un teatro de La Habana y participa en importantes exposiciones nacionales. Un par de años más tarde se desempeña como grabador, aprendiendo una técnica que junto a la cerámica definirá su trayectoria artística desde 1965. Durante su carrera recibió numerosos premios, en Cuba y el extranjero entre los que destaca, en 1976, una medalla de oro en el 34º Congreso. Concurso Internacional de Cerámica Artística Contemporánea en Faenza, Italia. Pintor, grabador, diseñador, ceramista, gracias a su gran deseo de alcanzar la perfección y a su ética de trabajo, Sosabravo es hoy uno de los artistas más importantes y universalmente conocidos. Su obra se caracteriza por tres temas originales principales: la naturaleza, el ser humano y la máquina, todos unidos en una compleja unidad estética. Sosabravo recibió los premios más significativos de su país: Orden Félix Verela y Premio Nacional de Artes Plásticas, que atestiguan su aporte fundamental al panorama cultural cubano. Sus esculturas en vidrio son el resultado de una colaboración artística muy importante con ARS MURANO que comenzó en 1998.