Perfil del artista | caricatura

Tiago Hoisel

“ Soy graduado en Diseño Gráfico, pero incluso antes de comenzar la universidad, ya estaba dirigiendo mis estudios para las ilustraciones de humor, especialmente para las caricaturas. Durante la universidad mi rumbo no cambió y continué enfocándome en ilustraciones humorísticas más que en el diseño gráfico en sí. Gracias a ese enfoque, mi carrera se dirigió naturalmente hacia el campo de las ilustraciones. Poco a poco mi trabajo personal empezó a tener una identidad y empezó a ganar proyección a medida que se iba convirtiendo en un trabajo profesional. Crecí en Ilheus, una pequeña ciudad en la costa brasileña, a unos 400 km de Salvador. Durante mi infancia solía hacer muchas cosas como jugar al fútbol, pescar, criar peces y cangrejos y también me encantaba dibujar. Cuando tenía 14 años, descubrí el mundo de la caricatura a través del trabajo de un caricaturista llamado “Ique”, que publicaba su trabajo en “Veja”, que es la revista de mayor circulación en Brasil. Me encantaron mucho las caricaturas y a partir de ahí comencé a dibujar todos los días. Empecé copiando las caricaturas de Ique y poco a poco fui conociendo otros referentes y desarrollé mi propio estilo. Cuando comencé a estudiar Diseño Gráfico, aún no tenía idea de que algún día viviría como ilustrador profesional. He dibujado simplemente porque me gustaba demasiado. Curiosamente, 10 años después de mi primer contacto con las caricaturas de Iques en la revista “Veja”, fui invitado por la misma revista para publicar allí mi trabajo. Siempre me ha fascinado el realismo y la volumetría en la pintura. Desde que comencé a dibujar, el foco de mis estudios ha sido entender el comportamiento de la luz y de los diferentes materiales. Al principio, mi trabajo estaba hecho solo en grafito y lo limité como un intento de reproducir los volúmenes de la fotografía en escala de grises. Pasé unos cuatro años trabajando de esa manera, hasta que descubrí que mi percepción era lo suficientemente buena como para empezar a trabajar con los colores. En ese momento hice mis primeros experimentos con colores pasteles, lápices de colores y acuarelas. Todavía al comienzo de mis estudios con esas técnicas, descubrí Photoshop. Terminé dedicándome exclusivamente a él porque además de que los materiales convencionales son caros, con Photoshop podía usar el dibujo y el sombreado que había desarrollado con grafito y simplemente trabajar los colores. Poco a poco fui simplificando la base del lápiz y trabajando cada vez más con este programa, hasta que hice mi primer trabajo íntegramente en Photoshop. El momento en que compré mi primera tableta fue cuando terminé por completo mi migración a Photoshop y todavía sigo haciendo el trabajo completamente en la computadora, desde los borradores hasta el final. Es difícil especificar cuánto tiempo lleva completar un trabajo. Eso depende en gran medida de la complejidad de la ilustración y el grado de acabado. Como tiempo promedio, pido de dos a tres semanas para ilustraciones como ´Big Bad Wolf´, ´Teenboy´ o ´Lunch Time´”.