Nacido en Niterói, Río de Janeiro, en 1915, Milton Dacosta demostró desde niño fascinación por el arte, pues desde muy pequeño garabateaba y pintaba todo lo que podía alcanzar.
No tarda en decidirse a estudiar dibujo. Con apenas 14 años conoció a Augusto Hantz, un profesor alemán que le enseñó a Rio lo básico sobre el tema.
Aumenta la pasión y el interés por el arte. Por ello, un año después se matriculó en un curso gratuito en la Escuela Nacional de Bellas Artes. Allí recibe clases de uno de los grandes maestros de la figura humana y del bodegón de la época, el pintor José Marques Júnior.
En esta época se produjo la Revolución de 1930 que, entre varias articulaciones, decidió cerrar el colegio.
Indignado por este hecho, el artista se unió a otros, como Ado Malagoli y Edson Motta. Con ellos fundó el Centro Bernardelli en 1931.
Este grupo no sólo nació como una alternativa para que se difunda la educación artística formal, sino que también representa una forma de protesta por parte de estos pintores, que deciden luchar por la libertad de expresión artística.
En esta etapa se centra en la creación de composiciones más figurativas y también en la pintura de paisajes de escenas comunes. No pasó mucho tiempo para que se realizara su primera exposición, que tuvo lugar en 1936, después de que el artista cumpliera 21 años.
Vida y obra de Milton Dacosta: la transición hacia otras estéticas y técnicas
En la década de 1940 el artista alcanzó su madurez. Durante este período, influenciado por el cubismo, sus figuras humanas ya no parecen tan realistas como las primeras, ya que traen las distorsiones y narrativas geométricas de Pablo Picasso.
Durante este período obtuvo un premio con la obra “Cena de Atelier”. Luego parte hacia Portugal. Allí conoció a grandes referentes artísticos locales, como Almada Negreiros y António Pedro.
En busca de conocimientos y ampliar su repertorio como artista y ser humano, el carioca viaja por varios países de Europa. Acabó eligiendo Francia, más precisamente París, para vivir y estudiar.
En la “Ciudad de la Luz”, conozca algunos de los principales genios artísticos de la historia, como el maestro Pablo Picasso y el icónico Georges Braque. Frecuenta asiduamente el estudio de este último y pronto expone en importantes salones de París.
En 1947 decidió regresar a su tierra natal. Dos años más tarde conoció al amor de su vida, la pintora María Leontina. Se casa con ella y ambos se mudan a São Paulo.